lunes, 30 de abril de 2012

Despertad


Me era imposible finalizar este mes de abril sin escribir alguna cosa por aquí. Abril es el comienzo de la primavera, va aflorando lo que nos rodea, van iluminándose más y más nuestras casas y parece que nuestras vidas, a pesar del frio pasado, renacen para tomar las calles y las plazas.
Además hay muchas efemérides en este mes; En abril fue cuando una batalla eliminó las pequeñas libertades históricas que había tenido el territorio valenciano, en ese 25 de abril el mal vino por Almansa, un ejercito conquistó e impuso una represión terrible a estos territorios, ahora nadie lo recuerda, asumimos al conquistador y nos representamos con él, vino disfrazado el enemigo de muchas cosas y todas nos sirvieron para creer que el mejor camino era el equivocado.
En abril también lanzó Lenin sus tesis, que respondían a las demandas de una sociedad en crisis: La tierra para el que la trabaja, no a la guerra y todo el poder para los soviets, tienen mucho sentido en los días en los que vivimos ya que nosotros también queremos más trabajo cooperativo y no especulativo, no queremos que las cosas se sigan intentando arreglar con la amenaza o el hecho de una guerra y por supuesto queremos un democracia real, asamblearia y participativa con la responsabilidad que conlleva.
El 14 de abril del 31 se proclamó la República Española, el periodo más democrático y de mayor emancipación del proletariado de la historia de este país, más escuelas, reparto de tierras, la paz como ambición exterior y toda una serie de medidas tomadas para beneficiar a los que durante siglos se les humilló, robó y hundió.
Y hace ya menos, un abril de 1974, unos capitanes descontentos por la falta de libertad en su país, decidieron hacer una revolución, pasaría al imaginario colectivo con el nombre de la Revolución de los claveles, ya que el pueblo cuando salió a la calle colocó estas flores en los cañones de las armas de los soldados. Paradójicamente, muchos de estos capitanes no fueron al homenaje que se les hace anualmente, ya que dijeron que ellos lucharon por la democracia y que esta ya no existía en Portugal.
Y esto nos lleva a pensar en la situación que vivimos ahora, donde la mayor esperanza que tenemos es en que la sociedad evolucione, tenga un pensamiento crítico, luche con fuerza por lo que cree más justo. Pero no es así, vamos perdiendo los que creemos en un mundo donde la gente pueda vivir con dignidad, a esta sociedad le da lo mismo ahora que hay crisis, y le dio lo mismo antes, que en África la gente muera de hambre, que en Sudamérica esté explotada por las multinacionales primermundistas, les da lo mismo que allí la gente lo pase mal, utilizamos eufemismos como que son países en vías de desarrollo ¿Qué? Cuando se van a desarrollar si los estamos saqueando, para que aquí nos cuesten más baratos los productos que importamos.
Lo peor es cuando defendemos a empresas como Repsol, Santander, BBVA o Telefónica, multinacionales que saquean cualquier territorio, que pagan golpes de estado para lograr más beneficios de esos estados, que manipulan la opinión de los que vivimos en Europa porque también controlan la mayoría de medios de comunicación…
Hemos perdido la batalla por la educación, nos enseñan a obedecer, a ser disciplinados, a creer en lo que se nos dice sin ni siquiera planteárnoslo. Quizás hoy por hoy se ve más claro que nunca que no hay más ciego que el que no quiere ver, que la caverna de Platón sigue existiendo, nos han enganchado a televisores, futbol, videojuegos, novelas de mierda, revistas de vividores y gente sin principios. Lo importante es comprar, no importa de donde venga, si es bueno o malo, mientras haya salido en la tele… Nos venden lo que quieren, porque no nos importa nada, no nos importa el vecino, el amigo o el extranjero y así generan el mensaje de odio que se canaliza hacia la ultraderecha, representada en el PP en España y en el FN en Francia. Que fácil de entender es el mensaje de odia todo: No tienes trabajo,  no te atienden en el hospital, no te dan una subvención, tu novia se va con otro, pues no seas autocrítico, así nos lo dicta nuestra sociedad, no pienses lo que has hecho, no intentes rectificar, la culpa es del diferente, el que no es de los nuestros. Así es como gana adeptos el mensaje pseudofascista que impera en la sociedad.
Mientras eso pasa, el resto se tapa los ojos, lo saturan de noticias putrefactas y ya le eliminan sus ganas de ver lo que sucede, de llegar al fondo del asunto. No se llegan a plantear que ha pasado en este planeta para que 0’16% de la población controle el 66% del dinero, no se han planteado a quien benefician las medidas de austeridad, nos se han planteado porque en nuestro país hemos mandado toda la industria a China, India o Marruecos, porque aquí realmente no han subido los sueldos en quince años.
No se, hay veces que acabo cansadísimo de explicar y explicar que este mundo puede ser mejor, pero nunca pararé de hacer lo que hago, aunque en ocasiones solo me conteste mi propio eco. 

1 comentario:

  1. Enorabuena Iñaki, he conocido tu blog a través de tu hermano. Muy buena vision y explicacion de lo que pudo ser. " Si no podemos cambiar el mundo, al menos tratemos de que no nos cambie a nosotros", jamás te contestará tu eco, la semilla del cambio esta ya plantada y crecerá en las conciencias de la gente más evolucionada, esa que no necesita verse alienada por un gobierno pseudo-democrata que solo representa a los intereses del 1%. Animo, never give up¡¡

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