Este mundo, cambiante y
en movimiento constante, nos ofrece muchos retos que lograr superar.
Los días, más oscuros y fríos, logran helar muchas de nuestras
ilusiones, de nuestros anhelos, de esa sensación tan cálida y tierna que
nos ofrecen todas aquellas que nos quieren, que nos empujan a ser
mejores, que nos acompañan en el tortuoso camino por un mundo más
justo, libre y sostenible.
Yo camino con prisa,
sonriendo, con calma, pensando, con zapatillas, tropezando y
manteniendo el equilibrio; en ocasiones todo a la vez, otras
escogiendo mis pasos y viendo como un pie adelanta al otro.
Melancólico por el pasado, sacando todas sus lecciones, e impaciente
por ese mañana que tenemos que conquistar, reflexiono sobre todo lo
que tenemos que trabajar para acabar con esta hidra de mil cabezas,
que cuando crees haber cortado una aparecen otras diez, llamada
capitalismo.
En mi día a día ocupo
una posición privilegiada, un lugar al que llegué por medio de unas
primarias entre simpatizantes y afiliados de EUPV-Elda, después
hubieron 2.122 eldenses que depositaron su confianza en el proyecto
que simbolizan estas siglas, en el programa que se elaboró de manera
colectiva. Así, de esta forma, comencé hace algo más de un año
como concejal en el Ayuntamiento de mi ciudad, como digo un espacio
donde el eco de mi voz no solamente chocará contra las paredes y
personas que están de acuerdo con lo que digo, sino que logra llegar
a algunos oídos nuevos, a ciertos rincones, y todo gracias a este
altavoz público.
Mi objetivo político,
no ha consistido en otra cosa que en intentar concienciar cada vez a
más gente, en que muchas de las personas que deambulamos por esta
sociedad seamos conscientes de que el sistema capitalista es el
principal culpable de las miles de muertes por hambre que se dan
diariamente en el mundo, que el desastre ecológico y, por tanto, la
autedestrucción como especie a la que nos acercamos cada minuto es
producto de la avaricia económica de unos cuantos que exprimen este
mundo por conseguir más beneficios, permitiendo la guerra, la
semi-esclavitud, la degradación de los seres humanos, los animales y
plantas ante el pensamiento de que todo vale si aporta más dinero a un
pequeño grupo de personas en este mundo.
No os digo esto porque
soy un iluminado, ni porque me considere más listo que nadie, casi lo contrario, hablo
de todo esto después de un riguroso análisis de la realidad, de la
búsqueda de información, de la lectura, del debate, de la simple
concepción de que si no hay un control democrático de la economía,
unos derechos básicos para toda la población, no habrá futuro para
nadie.
De esta manera,
explicaros que me siento con una gran responsabilidad, que cada día
me exijo más y más para que de una manera pedagógica la gente
pueda ver las cosas como yo lo hago, para dotar a esta población de
los instrumentos necesarios para que puedan decidir y que ese
empoderamiento social, se traduzca en la máxima participación en movimientos
sociales, políticos y culturales. No podemos consentir que los
intereses de una minoría se pongan por encima de la
toda la clase trabajadora y empobrecida. Sé que es una tarea
titánica, pero tenemos que comenzar a dejar de lado esa apatía, ese
conformismo y comenzar a tomar consciencia de los que ocurre en el
mundo, de lo que le ocurre a tu vecino. Así que ampliemos los lazos
de solidaridad, informémonos de una manera crítica, dejemos de lado
a las grandes empresas de información que nos obligan a resignarnos,
a esa quietud marmórea. Es increíble que podamos saber lo que ha
sucedido en el fútbol en las últimas décadas y seamos incapaces de
recordar quién cambió el artículo 135 de la constitución, quién
privatizó casi todas las empresas públicas, quién desindustrializó
el país y quienes son los que han saqueado el dinero de todos y
todas nosotras.
Por último, si Rajoy es
nuestro presidente es porque, como sociedad, nos lo merecemos. Sino
somos capaces de exigir más a nuestros representantes, participar,
criticar, luchar y pensar. Entonces, tendrá razón el sangriento
dictador y de verdad se quedo todo “Atado y bien atado”.
Creo que mejor reflexión imposible.La cuestión mas importante es poder hacer llegar estas cosas al mayor número de personas posible para ir abriendo camino en este infierno que nos han montado y que condiciona todas nuestras vidas.Pero pienso que esta situación de emergencia continua que tenemos obligará a la gente que la padece a plantearse su conformismo o su lucha para construir entre todos un mundo mas habitable.
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