Después
de la anterior entrada, centrada en España, me propongo a seguir contando como
continuó la Gran Marcha de las personas por una vida mejor, en paz y en
libertad.
El
mundo que despertaba al finalizar el horror de la IIª Guerra Mundial estaba
destruido y desolado. Se crea la Organización de las Naciones Unidas para
resolver los problemas que surgieran entre los países por la vía diplomática,
como si fuera un gobierno mundial. Eso sí, los países vencedores tenían (y siguen
teniendo) más fuerza que el resto en el Consejo de Seguridad de la ONU, ya que
son los únicos capaces de vetar resoluciones de la Asamblea. Por lo tanto, con
negociaciones entre Gran Bretaña, EEUU, Francia, URSS y China es como se
consigue que salgan a delante determinadas propuestas.

Realmente,
la vencedora de la Guerra fue la URSS; consiguió entrar en Berlín, llevó la
mayoría del esfuerzo bélico y fue la que perdió más gente (24 millones de
soviéticos perecieron). Viendo esto, ya al final de la contienda, los gobiernos
de EEUU, Reino Unido y Francia veían con recelo al gigante comunista y como
próximo enemigo. El que un estado que estaba acabando con las clases sociales,
que se convirtió en una gran potencia industrial en poco más de 20 años, que
era considerado como un paraíso del proletariado mundial, fuera la gran
triunfadora del conflicto no se veía con buenos ojos desde occidente. Estos
estados consideraron a la URSS un aliado importante en guerra, pero un peligro
grandísimo para sus intereses en paz.
La
URSS, EEUU, Francia y Gran Bretaña se dividieron Europa por áreas de
influencia. Polonia, Hungría, Rumania, Bulgaria y parte de Alemania cayeron
bajo el poder soviético. Eran zonas de escasa fuerza de los partidos comunistas
antes de la guerra (salvo en Alemania) y fue muy difícil la creación de una
sociedad socialista ante la mentalidad conservadora de los pueblos que las
habitaban. Mientras, en otros países que habían quedado en la órbita
estadounidense, como Francia e Italia, a pesar de la fuerza electoral que
tenían sus partidos comunistas, no se les permitió gobernar haciendo que se
unieran democristianos, liberales, socialdemócratas y todo el que pudiera para
contrarrestar el poder del PCF y PCI. En Grecia, que estaba inmerso en una
guerra civil, EEUU y Reino Unido apoyaron a la facción más conservadora de la
contienda para que la izquierda no ganara la guerra y pudiera incluirse en
dentro de los países socialistas. Más o menos como pasó en China, pero allí Mao
sí que logró imponerse al tiránico régimen nacionalista apoyado, como no, por
EEUU. A España, como ya hemos hablado, se le abandonó a su suerte con Franco,
que había apoyado a Hitler y Mussolini en la 2ª Guerra Mundial y que era
dictador gracias al apoyo que le dieron en la Guerra de España, eso sí, era
anticomunista.

La
sociedad mundial sentía que la “Gran Marcha” que llevaban caminada desde hacía
siglos, por fin, iba a ofrecerles una vida digna. El empuje de la Unión
Soviética en la IIª GM les daba alas a todos los defensores de la libertad, igualdad
y fraternidad, el gran lema de la Revolución francesa. En Latinoamérica, Asia,
África y Europa se veía el momento propicio para acabar con las clases
sociales, con la dualidad de los países ricos vs. países pobres, para fulminar
la miseria, el hambre y la pobreza. Pero EEUU, Reino Unido y sus aliados no
querían que esto sucediera. Los Estados Unidos comenzaron a desarrollar la
política de “contención” por todo el mundo; esta consistía en que el comunismo
no se desarrollara en las zonas bajo su control y en las que sus empresas
tenían intereses. Para ello subvencionó golpes de estado, armó, financió y
entrenó grupos de paramilitares con la intención de asesinar a todo el que
estuviera en contra de sus dictadores o gobernantes afines (Podemos decir, claramente,
que apoyó dictaduras, bombardeó o dirigió golpes de estado en Filipinas, Irán,
Guatemala, Indonesia, Cuba, Panamá, Rep. Dominicana, Omar, Timor Oriental, El
Salvador, Nicaragua, Brasil, Chile, Líbano y Libia entre otros que se me
escaparán). En Europa puso en marcha el plan Marshall, con él se intentaban
varias cosas: Primero, lograr la reconstrucción de los países aliados para que
no hubieran revoluciones en ellos; segundo, crear mercados para los productos
estadounidenses; y, por último, enriquecer a esta gran superpotencia, ya que
EEUU daba créditos para la reconstrucción, pero luego estos países tenían que
comprar todos los materiales a empresas yanquis, por lo tanto el dinero seguía
circulando a favor de quien daba el crédito. Con ello, EEUU no solo logró estos
objetivos, sino que además consiguió hacerse una publicidad muy buena entre los
países comunistas, a pesar de que ellos también tuvieron la oportunidad de ser
reconstruidos gracias al plan Molotov (solo hay que visitar ciudades como Berlín
o Varsovia para verlo). Además consiguió que estos países aliados apostaran por
una economía capitalista, apartó a los partidos comunistas de Italia y Francia del
gobierno a pesar de estar en disposición de gobernar varias veces (no les daban
ayudas si gobernaban comunistas) y consiguió hacer de su política exterior la
política de Europa y entre ambos acabaron con muchos movimientos de
autodeterminación y de liberación.

Dentro
de las fronteras norteamericanas se persiguió el comunismo, el macartismo fue
un claro ejemplo. En la industria del cine y en el mundo de la cultura habían
muchas personas con afinidad a las ideas comunistas, esto llevó a un
persecución, investigación y, en muchos casos, expulsión o encarcelación de los
que pudieran ser sospechosos. “La tierra de la libertades” se convirtió así en
un estado en que estaba prohibido pensar en una sociedad igualitaria, estabas
con ellos o contra ellos. De esta manera se obligó a declarar frente al senador
McCarthy, en el Comité de Actividades Antiamericanas, y se truncó la carrera de
muchos artistas, entre los que se vieron implicados podemos destacar: Charles
Chaplin, Groucho Marx, Bertold Brecht, Frank Capra, Humphrey Bogart, Lauren
Bacall, Billy Wilder, Henry Fonda, Gene Kelly, Katharine Hepburn y muchos más,
sumados a los “Diez de Hollywood” que fueron los auténticos perdedores de esta
historia. Por lo tanto, la democracia estadounidense carecía de la libertad
necesaria para lograr una sociedad más justa, esto se demostró con la
segregación racial de los negros en los estados sureños, que no se solucionó
algo hasta bien entrados en los 60, por ejemplo.

La ONU
fue creada para acabar con los conflictos, pero generó también otros muchos,
como el enquistado conflicto árabe-israelí. Con el duro golpe que se le dio a
la población judía-europea en el holocausto, por parte de los nazis, se intentó
congraciarse con ellos, entregándoles un país en lo que ellos consideraban su
tierra santa. El problema, vino de que esa nueva nación se instaló en un lugar
en el que no solo ellos lo consideraban sagrado, si no que los musulmanes, y
cristianos de todo tipo también. Palestina perdió mucho territorio para que
encajase este estado hebreo y comenzaron una guerra que era imposible que
ganaran con los apoyos de Israel
(Francia, EEUU y Gran Bretaña como no). El conflicto se fue arraigando por lo
antagónicas de las posiciones de palestinos e israelíes. Multitud de guerras,
que fueron quitándoles territorio a los palestinos, hasta que al final se
quedaron sin nada. Muchos de ellos tuvieron que exiliarse a los países
vecinos y los que viven en los territorios ocupados son masacrados, humillados
y empobrecidos. Es triste ver que un pueblo tan castigado como el judío a lo
largo de los tiempos, haya hecho y siga haciendo lo mismo que les hicieron a
ellos.

Los
años 50 comenzaron con la guerra de Corea; esta había quedado dividida en dos
al finalizar la guerra y las ideas comunistas estaban aflorando en el lado
ocupado por los norteamericanos y las escaramuzas se daban entre ambas partes,
que tenían como frontera el Paralelo 38. Al final, después de un ataque del
sur, el norte intentó invadirlo y comenzó la guerra, la primera gran batalla
entre los dos bloques en la guerra fría. La ONU había permitido la actuación de
EEUU allí, ya que el embajador de la URSS boicoteó la sesión por no darle un
asiento a China en el Consejo de Seguridad y que lo siguiera ostentando el
gobierno anterior Chino que ahora solo tenía Taiwán. Para los norteamericanos
fue un paseo triunfal, cruzaron el paralelo 38 y estuvieron cerca de tomar toda
la península coreana, ni el ejército del norte, ni las guerrillas los podían
parar. Hasta que la nueva República Popular China ayudó a los norcoreanos con
un millón y medio de hombres y la URSS les ayudó a armarse. Finalmente, el
Paralelo 38 continuó siendo la frontera entre las dos coreas, se radicalizaron
las ideas, en el norte hay un sistema comunista con la jefatura del
estado hereditaria, algo indecente para esta ideología, y en el sur se instauraron varias
dictaduras que duraron cerca de 40 años; así pudieron acabar con los comunistas
que habían dentro de sus fronteras, se les permitió que, hasta la fecha, los
derechos laborales de los surcoreanos fueran inexistentes y, sin embargo, que
muchos tuvieran estudios universitarios, de esta manera tuvo una economía, en
cuanto al PIB, muy floreciente.

Las
guerrillas en Sudamérica fueron constantes ante la tutela odiosa que EEUU tenía
sobre sus gobiernos. Cuba era como un territorio más de la potencia
norteamericana; el juego, la prostitución, los cabarets, las drogas y la mafia
inundaban la pequeña isla bajo el gobierno títere de Batista, mientras la
población vivía en el analfabetismo, con una agricultura controlada por grandes
terratenientes, que a los jornaleros que la trabajaban, apenas le daba para un
sueldo de miseria y subsistencia. En ese momento aparecieron los guerrilleros
de Sierra Maestra, muy pocos en un principio, pero que con la ayuda de la
población consiguieron derrocar la dictadura de Batista y hacer que la
revolución cubana comenzara su largo camino por la dignidad de los pueblos de
Latinoamérica. Entre sus líderes se encontraban Fidel y Raúl Castro, Ernesto
“Che” Guevara o Camilo Cienfuegos, que se hicieron con el cariño del pueblo,
lograron que la mayoría se implicara en este proyecto, que otorgaría a este
pequeño país caribeño el orgullo sustraído durante tantos siglos,
proporcionaron a los hijos de la nada el derecho a educación, a sanidad o a
tener una vida digna trabajando en el campo o en la ciudad. Aunque hubo quien
se marchó al exilio, quien se instaló en Miami con un mensaje de odio hacia
esos “barbudos” que le habían quitado sus privilegios.

Con los
años 60 una nueva generación, que no había vivido el horror de la II Guerra
Mundial, empezó a despertar y a reivindicar un mundo más justo, más
igualitario. El “Che” Guevara dejó sus cargos en Cuba y fue por África y Latinoamérica,
con su impulso revolucionario, intentando dar soporte y experiencia a los
movimientos de estos países. Finalmente, lo mataron en Bolivia, donde quería
derrocar al gobierno y extender la revolución por Sudamérica.
En
Vietnam, hubo una situación parecida a la que ocurrió en Corea, EEUU instauró
un régimen dictatorial sud vietnamita ya que sabían que el referéndum acordado
para esta zona iba a ser ganado por los que querían la unión con Vietnam del
Norte. La dictadura que se puso en marcha fue muy represiva y comenzó a
asesinar o recluir a todos los que simpatizaran con las ideas de Vietnam del
norte. Por ello, se crearon grupos guerrilleros, el famoso Vietcong, al cual
suministraba armamento el gobierno de Ho Chi Minh. En 1963, la CIA orquestó otro
golpe de estado contra el dictador que había colocado 3 años antes, el nuevo
era más fácil de manipular, pero ante la pérdida de terreno frente al norte y
el descontrol que supuso la guerra de guerrillas dentro de Vietnam del Sur,
EEUU en 1965 decidió intervenir. Todos sabemos lo que supuso Vietnam para EEUU,
lo hemos visto en multitud de películas y documentales, pero también debemos
entender por qué hizo este gran sacrificio: Estos años de guerra fueron un
aviso a todas las guerrillas anticoloniales, como lo fue el que hizo Francia
con Argelia por esa misma época, fue un aviso a las guerrillas comunistas que
querían acabar con muchos de los gobiernos al servicio de los norteamericanos,
fue un aviso para los países democráticos de hasta donde eran capaces de llegar
para no perder cuota de poder en el inmenso tablero de ajedrez en el que se
convirtió el planeta. Finalmente, EEUU perdió la guerra; el enemigo estaba
mejor asentado en el terreno y sus soldados estaban más motivados por una
sociedad justa. Los estadounidenses tenían un movimiento hippy que abogaba por
la finalización de la contienda, miles de bajas y de mutilados, y entendieron
que por más bombas que arrojaran, Vietnam de Norte y el Vietcong no se
rendirían.

Quizá,
los años 60 fueron la última época en la que la sociedad se reveló ante lo
establecido. En Checoslovaquia, en 1968, se intentó hacer un gobierno más
abierto a las inquietudes de sus ciudadanos y se abrió una tercera vía; más
democrática, que no sabemos cómo hubiera germinado ya que el Pacto de Varsovia,
con la URSS a la cabeza, invadió este país y acabó con la “Primavera de Praga”,
un hecho poco criticado por occidente ante el miedo que daba lo que hubiera
ocurrido en este país si hubiera triunfado estas reformas. En París se desarrolló
el “Mayo del 68”, un intento de revolución estudiantil, que hizo que se
tambaleara el sistema democrático occidental, los estudiantes fueron apoyados
por los obreros y el PCF con una huelga general, se quería un mundo más justo,
más democrático, más igualitario; finalmente, después de las barricadas, las
huelgas, los encierros, los puños en alto, se convocaron elecciones y De Gaulle
continuó como presidente de Francia.

Y así
entraron los años 70, la resaca de los sesenta se hacía notar, aunque aún
hubieron más movimientos para lograr un mundo más humano; en Chile Salvador
Allende gana las elecciones y comienza a implantar un régimen de libertades y
de dignidad para sus habitantes, esto se opone a lo que EEUU piensa y el 11 de
septiembre de 1973 la CIA orquesta un golpe de estado para acabar con este
gobierno, en mi mente aún resuenan la palabras de Salvador Allende mientras el
palacio de la Moneda era bombardeado y el esperaba a los golpistas con un AK-47
en sus manos. Murió, y con él la ilusión de muchos pueblos de La Tierra de
lograr un sociedad más igualitaria por medio de las elecciones, esto llevó a la
formación de multitud de guerrillas para tomar el poder como lo hicieron los
cubanos, ahora no mataban o encerraban a comunistas, intelectuales, izquierdas
o sindicalistas pasivos en sus casas, ahora acababan con ellos frente a frente,
en una lucha desigual y que solo servía para que la dignidad de muchos pueblos
aumentara.

En
España, ante el impulso que supuso el “mayo del 68” francés, comenzó la época
con más huelgas y movilizaciones de su historia reciente, no fueron tantas como
para hacer caer al régimen del todo, pero obligó a este a plantearse un vía
democrática para poder seguir subsistiendo.
En todo
el mundo hubo una crisis importante por la subida del petróleo, esto llevó a
muchos países del tercer mundo a la ruina absoluta, ya que pidieron créditos al
FMI y aún hoy siguen pagando los intereses, además este dinero que obtenían no
se utilizaba para ayudar a la población, si no que en muchos casos servían para
que muchos dictadores, africanos y latinoamericanos mayoritariamente, afianzaran
su poder y acabaran con la oposición, con la inestimable ayuda y apoyo de EEUU,
por supuesto. En occidente, llevó a una revolución tecnológica que logró
importantes avances industriales, aunque ya se empezaron a deslocalizar
empresas para llevar la producción a países con menos derechos laborales,
empezaron a caer lo salarios y se rompió el pacto keynesiano, por lo que cada
vez, a partir de esta época, el capitalismo se iba haciendo más voraz y el
proletariado más débil. Las televisiones comenzaron a estar en todos los
hogares y esto propició que la sociedad europea y americana cada día estuviera
más manipulada por el poder, cada vez más adormecida por los programas de
entretenimiento o deportes y el luchar por tus derechos, el informarte de un
manera menos oficialista, el ansia por seguir aprendiendo y caminando hacia una
humanidad más justa, fuera sustituido por un electrodoméstico que se convirtió
en el punto más importante de los hogares, así acabaron con las
revoluciones.

Mientras
la URSS ya no ofrecía nada novedoso, excesivamente burocratizada, se estancó de
manera alarmante en estos años 70, con Brézhnev a la cabeza. A ellos no les
influyó la crisis del petróleo porque tenían sus propios pozos, esto les llevó
a no desarrollarse tecnológicamente tanto como sus rivales capitalistas. Los
derechos sociales en la URSS eran infinitamente mejores que en el país
capitalista más de izquierdas, pero este inmovilismo, unido a la propaganda que
recibían de occidente, la desunión con otros países comunistas y la falta de
autocrítica, consiguió sembrar la semilla de la duda en el país del proletariado;
ya no se recordaba cómo se vivía con el Zar, los logros de la revolución se
veían como algo normal, algo que perduraría, mucha gente no se dio cuenta que
el capitalismo era África y Latinoamérica también, para que unos vivan bien,
otros tienen que sufrir. La carrera armamentística soviética fue un desembolso
excesivo que se tenía que haber empleado en otros menesteres, se tendría que
haber luchado más porque la gente comprendiera la importancia del sistema en el
que vivían, para luego no llegar a la situación que se llegó, para no tener que
sospechar de todos.
La Gran
Marcha se iba ralentizando, confundiendo y no se sabía muy bien donde ir…
Con
esto me despido de este proyecto llamado La Gran Marcha, espero que sirva para
el debate, para informaros de una manera más social de lo que ha sido la
historia de nuestros antecesores, de los que nacieron como nosotros, en el
estrato más amplio de la sociedad, en el proletariado…
(Muchas
gracias a los dos o tres que hayan leído todas las entradas y lleguen hasta
estas palabras)